La detección del cáncer en una etapa preliminar cuando es más curable puede significar que el tratamiento será más eficaz. Por lo tanto, los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) recomiendan que las personas con el VIH (aun quienes han sido vacunadas) se sometan regularmente a exámenes de detección del cáncer anal y del cáncer del cuello uterino.
Examen de detección del cáncer anal
A todos los adultos con el VIH se les debe evaluar anualmente para determinar si tienen anomalías del ano (como dolor, quemazón o masas) y hacer un examen anorrectal digital (DARE, por sus siglas en inglés). Durante un DARE, el proveedor de atención de salud examinará la parte externa del ano y, después de ponerse guantes, introducirá al recto un dedo lubricado para ver si descubre algo anormal. Si sucede esto último, se recolectan células anales y se estudian para ver si presentan señales de precáncer o de cáncer.
La edad en la cual se debe iniciar el examen de detección del cáncer anal depende del riesgo individual. La mayoría de las personas con el VIH deben comenzar a hacerse ese examen a los 45 años. Otras personas, como los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y con mujeres transgénero, están expuestos a un mayor riesgo de cáncer anal y deben empezar a hacerse el examen de detección correspondiente a los 35 años de edad.
Examen de detección del cáncer del cuello uterino
Una vez que se le diagnostica la infección por el VIH a una persona mayor de 21 años, debe hacerse un examen anual de detección del cáncer del cuello uterino, que puede incluir una prueba de detección del VPH para determinar el tipo de VPH causante y un frotis de Papanicolaou para recolectar células del cuello uterino y examinarlas para ver si muestran señales de precáncer o de cáncer. Si se descubren señales de precáncer o de cáncer o si la persona tiene el VPH de alto riesgo, es probable que el proveedor de atención de salud tenga que hacerle más análisis, como una colposcopia para examinar el cuello uterino, la vagina y la vulva con más detenimiento.
Algunos factores como la edad y la disponibilidad de análisis pueden afectar la clase de pruebas empleadas.